Cogidos de la mano e imaginando
el centro de una esfera, ponen ahí,
al mismo tiempo, el pensamiento de
una rosa.
A fuerza de intensidad estalla
una semilla, una semilla
abstracta, una semilla que brota
en un instante, acontece un
segundo y se marchita toda, en
medio del silencio del universo.
Queda sólo el aliento de una
intensa experiencia: el bajón
repentino, el peso aéreo, el
detonado acto de la
multiplicación de las metáforas.
Informa: Antonio Martín de las Mulas
Fotografía: Liliana Lara