Son expresiones agudas;
nosotros fríos con esta aspereza,
no avistamos la nueva aura,
olvidamos a los niños en la intemperie.
Cambio, debemos con nuestras manos
juntas.
La diferencia social provoquemos;
susurros dediquemos a los decaídos,
que se apacigüen sus suplicios,
por la compañía de nuestras voces.
Amor, demos amor a la humanidad.
Son alientos sugestivos;
nosotros engendremos linduras,
con caricias a los huérfanos,
volvámonos nosotros amigos.
Informa: Rusvelt Nivia