A veces encallamos

A VECES ENCALLAMOS EN EL SENTIDO COMÚN
DE QUERER NOMBRAR LO INNOMBRABLE.

De sacudir el mundo a punta de versos y tinta. Y naufragamos en el artificio
y en la redundancia de nuestra imagen. Establecer límites no es suficiente,
describirnos como viento y vuelo, no nos hace viajeros, y a base de piedras
enterradas en las rodillas, aprendemos que la misión auténtica es reducirnos
a la esencia de lo que queremos nombrar. Dejar de clamar como postura, ser
sencillamente una verdad que se reconoce a simple vista, con la boca cerrada.

@lemotbulle

 

Foto: Mario González

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *