Artista, despierta la imaginación
rompiente,
fluye en sabiduría con la musa,
cuando columbra ella sobre la luna,
toca el verso con alegoría elevada.
Una explosión de pinturas,
propaga por toda la estepa,
para el nacimiento del sinsajo.
Date la vida por esta poesía.
Sube a las piedras del cielo y
llénate de visiones fantásticas,
adentra en la mente de la salvadora.
Tu reflejo en el vuelo de ella,
para surtir la creación perpleja,
hazlo de nebulosa y
ensoñado llega a sus otros ojos.
Informa: Rusvelt Nivia Castellanos